Obesidad Emocional

En ciertos momentos de la vida se tiende a comer más, y muchas veces coincide con momentos en los que el estado de ánimo no es favorable, es decir en momentos anímicos bajos (depresión, tristeza, etc..) o de tensión y estrés (ansiedad) muchas personas tienden a comer más de la cuenta no siendo siempre conscientes de las cantidades de alimentos que consumen o la frecuencia con la que lo hacen (picar a todas horas).

En  tal caso hablamos de obesidad emocional se presenta cuando las emociones tienen un impacto significativo en la ingesta de alimentos lo que puede llevar a la persona al sobrepeso  o agravar un problema de obesidad si ya se padece.

Algunos estudios médicos apuntan a que este tipo de obesidad es más frecuente en mujeres que en hombres, que tienden a comer más alimentos cuando están presentan ansiedad, tristeza o enojo.

En muchos casos, quienes padecen obesidad emocional no distinguen entre la necesidad de comer por hambre de la necesidad de comer que provoca ese estado anímico negativo.

Este tipo de obesidad debe tratarse, además de con la técnica apropiada (banda gástrica, bypass gástrico, tubo gástrico, etc..) cuando el Índice de Masa Corporal lo justifique, con un programa de acompañamiento psicológico que le ayude a controlar esos estados emocionales que le impulsan a comer. No obstante el hecho de que la capacidad del estómago esté reducida y se sienta saciado antes ya contribuye a que esa situación de «comer sin hambre» ocurra cada vez menos ya que el paciente simplemente no puede comer puesto que se siente saciado con pocas cantidades de comida.

De este modo, en cualquier tratamiento de la obesidad es necesario determinar la conducta alimentaria de cada paciente obeso personalizando el tratamiento, eligiendo la técnica apropiada y haciéndolo no sólo más efectivo si no integral, cubriendo este aspecto de «obesidad emocional’ y dejando en el paciente herramientas para no recaer, aprender nuevos hábitos alimenticios y de estilo de vida y conseguir que los mantenga a largo plazo.